Lost in Austen

Lost in Austen es una serie de cuatro partes 2008 para la televisión británica ITV red, escrita por Guy Andrews como una fantasiosa adaptación de Orgullo y Prejuicio de Jane Austen . En diciembre de 2009 se situó en el 48 en el 'Top 50 programas de televisión de la Noughties', una lista publicada en The Times (Londres). 

Amanda Price, una gran fan de Jane Austen que vive en Hammersmith, acaba de rechazar la propuesta de matrimonio de su poco romántico novio infiel y descubre al personaje de Elizabeth Bennet en una camisa de dormir en su cuarto de baño y cree que es una alucinación. Amanda se convence de que la novela de Jane Austen ha demostrado que ella puede fijar estándares más altos para un marido y su mente desesperada se imagina cosas.

Sin embargo, Amanda cruza una puerta secreta oculta en la casa de los Bennet cuando Elizabeth vuelve por segunda vez; de esta manera ambas jóvenes intercambian lugares para echar un vistazo a lo que realmente desean. 

En su estadía en Longbourn, Amanda tratará de no interferir en la historia original, pero ¿cómo hacerlo si la estrella principal no está? Las cosas empeorarán cuando Bingley pretenda cortejarla en vez de a Jane, lo cual altera toda la trama del libro. En un inicio creí que las cosas iban a darse un poco tediosas ¡en realidad pone el universo de Orgullo y Prejuicio de cabeza! Con cada intento de la pobre chica por arreglar las cosas, más las torcía y provocaba que quisiera darme un tiro. A eso hay que añadirle que su comportamiento para la época no era muy adecuada ¡vamos! Hacer una simple reverencia no están difícil.

¿Oyes ese sonido, George? ¡Brrrr! Es Jane Austen retorciéndose en su tumba como un gato en la lavadora. (Amanda Price)

No obstante hallo ciertas situaciones algo realistas en esa fantasía. La más importante va en contra del determinismo que rodea a Elizabeth y Darcy, pues muchas personas creen que "no pudo haber sido de otra manera" debido a que "eran el uno para el otro". Esto es totalmente refutado en la serie constantemente porque el final es muy distinto, no solo para los protagonistas sino para todos. Me hizo replantear ese romance y sustentarlo simplemente en que nació por la constante interacción entre ellos dos creando una atracción convertida posteriormente en amor. Eso significa que no era cuestión de destino sino de circunstancias y la existencia de más de una persona que te puede hacer feliz de distinta manera. En resumen: Darcy decidió ser feliz con la persona que escogió independientemente de lo que la historia (de la cual ya estaba enterado) dictara.

Otro aspecto desarrollado, el cual fue una bofetada para mí, fue lo prejuiciosos que resultamos ser los lectores a veces. Con esto no quiero contradecir ni mucho menos atacar el trabajo de Austen, pero como en algún momento dijo Amanda ¡Jane Austen se sorprendería bastante al saber que había escrito eso!. Esta serie nos hace profundizar más en los caracteres de los personajes y en cuán complejos pueden llegar a ser sin una pluma de escritora restringiendo su capacidad de acción. Quizás Wickham no era malo así como Elizabeth, considerada. También es una interrogante fuerte para quienes sueñan con conocer al Sr. Darcy y el mundo en el que vive ¿qué sucedería si no es como te lo imaginaste? ¿la realidad se acerca a tu imaginación?

Finalmente debo recalcar que disfruté de esta comedia aunque los actores no fueron los más idóneos para los papeles designados (a pesar de que me encantan Elliot Cowan y Tom Mison), pero nada es perfecto. Espero que disfruten de esta serie porque ¡no se pueden perder la escena donde Amanda patea a Collins!